Leyendo a G.E. Moore

Leyendo a G.E. Moore
Ca'n Pastilla 27 Marzo 2016

sábado, 26 de marzo de 2016

LA ILUSTRACIÓN Y SUS ENEMIGOS

Anthony Pagden, profesor de de Historia y Ciencias Políticas de la Universidad de California (UCLA) tras pasar por Oxford, Cambridge y Harvard, acaba de publicar “La Ilustración. Y por qué sigue siendo importante para nosotros” en Alianza. Una continuación de su conocido “La Ilustración y sus enemigos”, en el que recogía el texto reelaborado, de unas conferencias dictadas en la sede madrileña de la UNED en 1999, y en las que abordó algunos de los asuntos centrales de la filosofía política ilustrada. Pagden, ha venido a ser uno de los más conocidos representantes del grupo de estudiosos que, bajo la inspiración de Quentin Skinner, transformó la metodología y los enfoques analíticos, aplicados al estudio de la historia intelectual y de las ideas políticas.
A día de hoy podemos contemplar como, desgraciadamente, la diana de los ataques extremistas es la Ilustración. El penúltimo objetivo fue hace un mes, de nuevo, París, la ciudad que vio nacer el proyecto de modernidad más importante del mundo occidental. El último, de momento, ha sido hace unos días, en Bruselas. Y la mejor defensa ante esa barbarie, sigue siendo la propia Ilustración. Escribe Pagden: “Por mucho que sus valores estén siendo atacados, por elementos como los fundamentalistas estadounidenses y el Islam radical – e incluso no tan radical – es decir, por la religión organizada, la Ilustración sigue siendo la fuerza intelectual y cultural dominante en Occidente. La misma continúa ofreciendo un arma formidable contra el fanatismo”.
Un mundo, afirma Pagden, donde “escapar de la religión como una forma de organización, fue el paso verdaderamente original de la modernidad y de la Ilustración. Y esto no va a cambiar” ¿Cómo explicar los valores de la Ilustración a quienes no creen en ella, además del papel esencial de la razón, como motor del desarrollo individual y colectivo? “Es un proyecto importante y en incesante evolución. Proporciona una imagen de un mundo, capaz tanto de alcanzar cierto grado de universalidad, como de liberarse de las restricciones de la clase de normas morales interesadas, que ofrecen las comunidades religiosas y sus análogas ideologías laicas: el comunismo, el fascismo y, ahora, incluso el comunitarismo” asegura Pagden. Quien agrega: “Es importante, porque situó lo individual, lo frágil, lo mortal y lo imperfecto en el centro del cosmos. Sin la Ilustración, los avances de la civilización occidental, habrían sido quizá no imposibles, pero desde luego muy lentos, desde la salud a Internet”.
Y no olvida, el historiador, algo que resulta común a todos: “Está lo que hoy llamamos empatía, la conciencia de la experiencia humana compartida y, por tanto, la posibilidad de la existencia de valores humanos comunes, que no dependen de ninguna fe religiosa”.
“La religión tiende a impedir el desarrollo del intelecto, de la razón” opina Pagden, que añade: “El Islam es una religión primitiva. Quiero decir que, a diferencia del cristianismo, nunca se ha visto obligada a adaptar a las circunstancias de un mundo laico, moderno, lo que en realidad es un conjunto muy simple de creencias y mandatos, a medida de las necesidades de un pueblo tribal del siglo VII. El Islam nunca ha tenido que amoldarse, como el cristianismo, a los valores de la Ilustración. Esto no lo hace intelectualmente inferior al cristianismo, que también es bastante simple, o al judaísmo, pero si mucho más agresivo cuando se ve amenazado por la modernidad”.
Anthony Pagden
Mientras por un lado la Ilustración es atacada, por otro se le pide que despliegue sus principios de universalidad y ciudadanía, ante la ola de migraciones a Europa, o las ayudas al resto del mundo. “La ciudadanía siempre ha estado estrechamente ligada a las naciones. Y con los nuevos inmigrantes que fluyen a Europa desde Oriente Próximo y África, el concepto de ciudadanía se ha vuelto aún más restringido. Sin embargo, sin las aspiraciones de universalismo que la Ilustración formuló e inspiró, por las que ha sido denostada, no habría cooperantes, ni Médicos Sin Fronteras, ni Corte Internacional de Justicia, ni Naciones Unidas, ni existiría el concepto de derechos humanos y, en última instancia, la Unión Europea”.
No todo son luces, también hay sombras. El precio ha sido un mundo dividido en Norte y Sur, cuyo desequilibrio en prosperidad y las guerras, se achacan al intento de imponer los valores occidentales. “La creciente hostilidad hacia un mundo, al que se considera responsable del hecho, de que los beneficios de la modernidad, no se hayan distribuido equitativamente”, afirma Anthony Pagden. Es lo que Alain Finkielkraut llamó: El etnocentrismo de la mala conciencia de Occidente.
Como dijo Kant: “La Ilustración es un proceso en continuo devenir. El error de todas las religiones monoteístas, es suponer que tiene que haber un fin inmutable decretado por Dios. Y no lo hay. Pero si bien esta clase de perfección no existe, el progreso, desde luego, sí”.

Palma. Ca’n Pastilla a 6 de Enero del 2016.


2 comentarios:

  1. Entresaco esto " con los nuevos inmigrantes que fluyen a Europa desde Oriente Próximo y África, el concepto de ciudadanía se ha vuelto aún más restringido" para constatar que el neoliberalismo está impulsando una viejisima idea que ya existía en la época del imperio Romano y en la Grecia Clásica: la ciudadanía y los beneficios de ser considerado Ciudadano será restringida para las élites. Es lo que propugna Donald Trump, por nombrar un personaje de inquietante actualidad. Restringir los derechos de las personas es negarles su ciudadanía, sus derechos y reservarlos únicamente para los que el Estado considere que son dignos de tenerlos. Puedes ser habitante y persona, pero quizás no Ciudadano. Y creo que Europa está fracasando en eso y traicionando la ilustración, que fue la que le dio vida y valores a lo que hoy conocemos como Europa.

    El tema de la ilustración, aunque no es tema de tu post exactamente, siempre me ha resultado interesante, sobre todo en España por que creo que somos el único país de Europa donde se produjo un involucionismo suicida en el siglo XIX y que creo que es la razón primigenia de nuestro atraso secular. Pobres ilustrados (y estoy pensando en el pobre Jovellanos y los que vinieron después)que tuvieron que elegir bando en la guerra de Independencia Española, que luego tuvieron que soportar la reinstauración del absolutismo con Fernando VII (lo peor que le ha pasado a España) y que la oposición a Fernando VII era el Carlismo, aún mucho más retrógrado. Somos un país único...

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  2. Querido Kepa:
    Sí es indignante lo que está ocurriendo en Europa, con el viejo concepto de Ciudadanía, y los derechos que de él se derivaban. Es aterradora la falta de altura de los líderes políticos, incapaces de ver más allá de sus próximas opciones electorales, y cediendo por ello a los postulados demagojicos nacionalistas y xenófobos. En fin.
    Ya lo hemos comentado con anterioridad: nefasto fue para nuestra historia, que ganáramos la guerra contra los franceses. De todas formas no era fácil que penetraran en España con facilidad, la luces de la Ilustración. Debemos recordar que la principal crítica de los ilustrados, se dirigía a lo que llamaban "ciencia en los siglos de la ignorancia". Y los autores más influyentes en Europa de aquella "ciencia", conocidos comúnmente como "escolásticos", fueron Francisco de Vitoria, Domingo de Soto, Luis de Molina, Francisco Suárez... todos ellos españoles.
    Un fuerte abrazo,

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